El concepto de multimedia es tan antiguo como la comunicación humana ya que al expresarnos en una charla normal hablamos, en este caso sería el equivalente al sonido, escribimos, lo cual equivale al texto, observamos a nuestro interlocutor, correspondería al video y accionamos con gestos y movimientos de las manos, esto se asemeja a la animación. Con el auge de las aplicaciones multimedia esta palabra entró a formar parte de nuestro lenguaje habitual.
Para empezar debemos tener claro que la multimedia es la combinación de texto, sonido, animación y vídeo, la cual llega a nosotros por diferentes medios electrónicos. La multimedia estimula la mayoría de nuestros sentidos, la visión; el oído; el tacto, y lo más importante, nuestra parte cognitiva.
Contextualizando la temática con la actualidad, se puede afirmar que hoy en dia las redes informáticas y de telecomunicaciones son globales, están prácticamente popularizadas, pues su uso es fundamental en el desarrollo académico y cultural de la sociedad, a pesar de ser contenidos que estén en su totalidad al alcance de toda la población, pues deben tener ciertos elementos tecnológicos que les permitan su acceso a recursos en línea como distribuidos en una autopista de datos, en la cual las personas tendrán acceso a información electrónica de cualquier tipo.
La multimedia mejora las interfaces tradicionales, que están basados solo en texto y proporciona beneficios importantes que atraen y mantienen la atención y el interés del público; por otra parte también mejora la retención de la información presentada, pues gracias a sus diseños creativos se convierte en una forma de adquirir conocimientos de manera divertida.
Cualquier aplicación, documento o sistema multimedia está constituido por elementos informativos de diferente naturaleza, que coinciden en una misma intencionalidad comunicativa; recrear una experiencia de percepción integral, a la que, cada uno de ellos, aporta sus capacidades expresivas características; los textos a pesar de ser uno de los medios de comunicación más clásicos y tradicionales, sobre ellos descansa la estructura conceptual y argumental básica de buena parte de los productos multimedia, gracias, a su potencia abstractiva y a que constituyen un método muy rápido, preciso y sistemático de transmisión de información; por otra parte encontramos los gráficos, estos facilitan la expresión y la comprensión de ideas abstractas proponiendo representaciones más concretas y accesibles, además otro elemento importante son las animaciones aportan a las aplicaciones multimedia apariencia de veracidad y grandes dosis de expresividad, pues les permiten reconstruir seres del pasado, hechos históricos pretéritos, situaciones reales, o simplemente, realidades culturales; también tenemos dentro de los elementos multimedia a las imágenes son representaciones visuales estáticas; que junto con los textos, son el medio más utilizado en las aplicaciones multimedia para transmitir información. Otro elemento importante que consolida de alguna forma algunos elementos anteriores es el vídeo, en las aplicaciones multimedia, convierten las pantallas del ordenador en terminales de televisión y resultan un medio óptimo para mostrar los atributos dinámicos de un concepto, de un proceso o de un acontecimiento, gracias a su secuencialidad y su capacidad para desarrollar líneas argumentales; finalmente encontramos las aplicaciones de audio, este elemento brinda mensajes de naturaleza acústica de distinto tipo que aporta sonoridad.
Con el desarrollo de las tecnologías de la comunicación y acercándose a los limites de nuestras ficciones más elaboradas, es posible que creamos que el escenario de la comunicación humana se ha hecho más grande al añadir conceptos tan difundidos como digital, interactivo o multimedia. Y en cierto modo algo de verdad hay en ello, pero cabe pensar que hay que aclarar ciertos significados para entender los procesos digitales como parte de ese escenario, como personajes protagonistas de una obra planificada, pero pocas veces meditada.
Si hablamos de comunicación multimedia, manejamos una serie de conocimientos útiles, con componentes contextuales, viduales y sonoros, lenguajes ilimitados que muestran la riqueza de los elementos multimedia, pero no hacen explicito el potencial completos de estas combinaciones; esta combinación también la podemos denominar como convergencia tecnológica, no ha sido exactamente la encargada de generar nuevos medios de comunicación; más bien ha dado lugar a nuevos canales de comunicación útiles y razonables, que evidencian un estado de gran actividad por parte del espectador. De esta forma surge una nueva forma de comunicar, de compartir conocimientos con todo el mundo, sistemáticamente interconectados por medio de la red, participando de un mundo abierto en el cual reconocemos las fuerzas de atracción que conectan una idea y enlazan un pensamiento con otro. Sin embargo muchas veces ni los contenidos, ni la visualización de los elementos multimedia, se adecuan a los intereses y las necesidades de los usuarios, por lo cual tiene que ser el público el que se adapte a la distribución y presentación de los contenidos tecnológicos.
Pero como cualquier desarrollo tecnológico no todo es beneficio, muchas veces los avances traen consigo también algunas desventajas o limitaciones, las cuales hay que considerar, en el caso de la multimedia destacaré la escasez de normas y estándares para el desarrollo de este tipo de aplicaciones los cuales son necesarios para asegurar su funcionalidad sobre cualquier plataforma. Y como el mundo de la multimedia ha venido revolucionando y a llegado a cambiar y a desplazar muchas técnicas o metodologías tradicionales, desde luego hay que considerar la posición tanto del usuario como del desarrollador, ante cualquier cambio, se tiene que aplicar mucha ética durante el desarrollo de una aplicación, si se genera un producto, este debe ser con fines positivos, tanto para el desarrollador como para los clientes de la aplicación, así, también encontramos otras limitaciones como la adicción, distracción, aprendizajes incompletos y superficiales, desorientación informativa, aislamiento, visión parcial de la realidad, cansancio visual y otros inconvenientes físicos, entre otras; pero para combatirlas lo importante es que exista una adaptación total de la población con la tecnología, pues vivimos en un mundo tecnológico cambiante.
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